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jueves, 3 de enero de 2013

COMER DE VERDAD VERDAD


COMER DE VERDAD VERDAD

Si hay algo que me gusta de viajar, y de ir a donde vive mi familia materna en Barquisimeto es el comer. Aquí el comer no es igual que en otras partes, donde se come para quitar el hambre, comer antes de ir a trabajar o solo porque ya es la hora de la cena, aquí la comida tiene todo un sentido familiar y como quien dice “más que comer para vivir, es como vivir para comer”. Es el momento de estar todos juntos en la mesa disfrutando de los sabores, los condimentos y todo el queso y la nata que se pueda comer.

Aquí en las tierras del occidente del país se come de verdad verdad, cada plato tiene una importancia, no importa las veces que se repita siempre conseguirás un sabor nuevo. No hay nada que llegar a casa de un familiar y que te digan “Ven que estoy cocinando un cochinito frito que está buenísimo”. Que te den a comer una caraoticas y al probarlas no te salga otra expresión que no sea “que vaina tan buena” o que te den unos plátanos maduros frito con mantequilla y queso rallado que te hagan delirar, y es que, definitivamente aquí los sabores son únicos.

Aquí es donde a la carne este como este cocinada se le echa una salcita de ajo o una guasacaca de esas riquísima, donde toda ensalada lleva aguacate, donde a las caraotas se le pone un poco de nata o un buen queso de cabra y donde es necesario comer con un pan, para al terminar poder limpiar el plato y que no quede un rastro de comida en él. Y por supuesto un sabroso jugo de fruta con el que acompañar todo este banquete.

Aquí cuando se come se disfruta, aquí es de esos lugares donde se come sin pensar en dietas, en cuanto vamos a engordar o en que nos puede caer mal, para todo eso seguro hay una pastillita o algún tecito que lo pueda quitar. Aquí cuando se come se le rinde tributo a la canción de guaco que dice “Comer es lo que quiero yo hacer, toda mi vida será comer, es tan sabroso vivir y comer” tan solo ten presente dos cosas, cuando termines nunca digas que NO al ofrecerte más y cuando ya estés full notifícalo haciéndole un pequeño cariñito a tu estomago con tu mano y exprésate diciendo “Que Sabroso”.

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